Tu nuevo básico vegetal
La proteína texturizada de guisante es la hermana pequeña de la soja texturizada. Mucho menos conocida aunque con muchos beneficios tanto nutricionales como gastronómicos.
¿Te sorprende? Normal: los guisantes no destacan precisamente por su alto contenido proteico, como sí lo hacen otras legumbres. Eso sí, los productos que encuentras hechos con proteína de guisante no vienen del típico guisante verde que tienes en el congelador. Vienen del guisante amarillo, ese primo lejano que no no encuentras en el súper de tu barrio.
Aunque no pensamos en los guisantes como una gran fuente de proteínas (menos aún los de lata o congelados), la proteína que contienen es de buen valor biológico. Lo que más vas a ver por ahí es proteína de guisante en polvo, para batidos. ¿Por qué? Porque es una proteína de calidad, rica en aminoácidos esenciales, ideal para quien quiere ganar músculo o completar su ingesta.
No me gusta nada eso de hablar de proteína completa porque parece que los aminoácidos de las plantas sean peores, pero es una forma de indicar que todos los esenciales están un ratio que se considera adecuada poniendo como ejemplo la proteína animal. Sin embargo, recuerda que el cuerpo almacena estos aminoácidos y lo que cuenta es el cómputo total y la calidad de estos.
Lo más interesante es que la proteína de guisante es completa.
Ahora bien: las proteínas aisladas (en polvo) son una herramienta más. Útiles para deportistas o para momentos donde comer suficiente proteína con comida normal es complicado: dietas blandas, sin residuo... Pero hoy no hemos venido a hablar del batido post-gimnasio. O del gazpacho con prote porque tenemos calor y no queremos cocinar.
Hoy toca hablar de un formato que da mucho juego en la cocina: la proteína de guisante texturizada.
La alternativa que suma: proteína de guisante texturizada
Si ya tienes te manejas bien con la soja texturizado, suma este nuevo aliado: proteína de guisante texturizada. Sin soja y habitualmentesin gluten (ojo con las de granel y la contaminación cruzada). Perfecta para si buscas variedad de fuentes proteícas.
Ventajas:
Sin soja: buena noticia si tienes alergia o intolerancia, o si te han pedido que moderes el consumo.
Fácil de encontrar sin gluten (pero vigila el granel).
Se hidrata más rápido que la soja (aunque también se deshace antes si te pasas).
Ideal para albóndigas, croquetas, hamburguesas y rellenos, tiene una textura que “engacha”.
Necesita menos “pegamento” (aglutinantes como harinas o almidones) para compactar.
Lo que menos me gusta: en gramajes pequeños puede deshacerse demasiado rápido, incluso en cocciones cortas. Si quieres usarla en guisos tipo curry o estofados, prueba antes con una pequeña cantidad. Cuidado, te puedes encuentrar con un puré.
Dónde la encuentras
En tiendas veganas como Serra vegana o Veggie Room.
En tiendas especializadas online, en productos eco o de herbolario, como Naturitas o Planeta huerto.
En las secciones veggies, “de herbolario” o “sin gluten” de grandes superfíciles.
A granel en sitios como Gra de Gracia o Jaume Renobell, en Barcelona.
Cómo hidratar la proteína de guisante texturizada
Aquí no hay misterio, pero sí truco:
Fino:
Agua caliente si la quieres para “carnes vegetales”.
Directo al guiso o salsa… pero al final y pocos minutos.
Mediano:
Agua o caldo caliente hasta que ablande. Escurre bien.
O directo al guiso, cocinando hasta que esté tierno.
Grueso:
Agua/caldo caliente con especias, o
Líquido de marinado (cúbrelo bien, deja reposar y revisa textura).
Zorza vegana
La zorza es una receta gallega tradicional que se se hace ya en muchas otras zonas. En versión vegetal no es lo mismo, porque no lo és, pero es fácil y resultona. Ideal para estrenar la proteína de guisante gruesa (o mediana). También puedes usar soja texturizada si es lo que tienes.
Ingredientes:
200 g de proteína de guisante texturizada (mediana o gruesa)
250 ml caldo de verduras
1 cdta. pimentón picante (opcional)
1 cdta. pimentón dulce
1 cda. orégano
1 cdta. ajo en polvo
1 cdta. cebolla en polvo
4 cdas. aceite de oliva
Sal y pimienta al gusto
Agua caliente (la que pida la hidratación)
Indicaciones
Primero, hidrata la proteína de guisante en el caldo de verduras. Añade agua caliente hasta cubrir bien, dejando al menos dos dedos de líquido por encima. Dale el tiempo necesario para que se ablande por completo.
Cuando esté lista, escúrrela y prénsala bien para eliminar todo el líquido sobrante. Cuanto más seca quede, mejor se impregnará del aliño.
Mientras, mezcla en un bol todas las especias: el pimentón picante (si lo usas), el pimentón dulce, el orégano, el ajo en polvo y la cebolla en polvo. Reserva.
Añade dos cucharadas de aceite de oliva a la proteína bien escurrida y mezcla para que se impregne bien. A continuación, incorpora las especias y remueve hasta que todo quede repartido de forma uniforme.
Deja que marine un rato en la nevera para que los sabores se integren y coja bien el gusto.
Por último, cocina la zorza en una sartén con el aceite restante, o si prefieres, al horno hasta que esté dorada y lista para servir.
Acompaña con lo que te apetezca: patatas fritas o cocidas, arroz, verduras salteadas…
Es posibles que no tengas ganas de meterte en la cocina con el calor que hace.
En Vanetta tienen muchos productos ya listos para la sartén u o el horno. Aunque lo más famosos sea su variedad de cachopos, también tienen soja texturizada estilo zorza. Lo puedes hacer en la sartén o en el airfryer (horno eléctrico de pequeño tamaño). Puede comprar en su web o en tiendas veganas como VeggieRoom.